Tras muchos años Lexus ha regresado. Agradecido por cuanto ha conocido y a cuantos ha conocido, se decide a honrarlos poniendo en práctica lo aprendido.Está oscureciendo y llueve, apenas distingue el camino aunque sabe que debe estar a pocas millas de la última ciudad en la que vivió antes de su exilio, Restia.
Tal vez, los caminos de luz aprendidos del caballero errante dg le sirvan en esta situación, se arrodilla y sostiene una de sus manos firmemente, y comienza a murmurar al viento en la lengua elemental. Lo invita a reunirse en su mano. Poco a poco, el viento le muestra visiones de las cercanías.
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