Ayer nació una nueva leyenda urbana en la Uvigo, la del asesino del machete.
Mientras subía hacía el Gimnasio, con mis tres fieles escuderos, me sucedió una cosa rarísima (¡¡sí, solo me pasan cosas raras!!). Bueno es que mientras estaba esperando por el ascensor (os diréis a que coño voy al gimnasio si cojo el ascensor) tuve la ocurrencia de soltar una "rajada"(muy a mi estilo) la cual era: "Poco más y tengo que abrir la puerta a machetazos". La frase en principio iba dirigida a mis compañeros, pero cual fué mi sorpresa cuando descubrí que había tres chicas dentro del ascensor, luchando contra su instinto de supervivencia que las alentaba a cerrar de nuevo la puerta para alejarse de aquel monstruo (el monstruo era yo), al final decidieron salir pero pasaron como corderitos (mirandome con recelo, temerosas que las abriese en canal).
Me quedé inmóbil cuando las ví, tarde varios segundos en reaccionar mientras escuchaba en la lejanía: "Yo tía, a tios tan montunos había que echarlos de la facu", si así es mi facultad; ¡¡¡Viva el elitismo!!! Lo peor es que mis escuderos se escojonaron todo el camino hacía el gimnasio.
Bueno si algún día pasáis por industriales y escuchais una historia relacionada con un machete posiblemente naciese conmigo.
miércoles, 20 de mayo de 2009
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