Arcross observaba la cadena que sujetaba su pie derecho, dió un pequeño tirón y consiguió arrancarla de entre las baldosas. Apenas media medio metro y no estaba sujeta a nada en el otro extremo.
'¿De dónde demonios sales tú?', le preguntó intentando aplicar sus poderes de duda, '¿acaso sabes de dónde sales?¿Acaso sabes cual es tu destino final?¿Cónoces la mano que te forjó?' continuaba Arcross. Pero la cadena no se soltó.
Era la primera vez que no conseguía cambiar algo en este mundo persuadiéndolo con preguntas encadenadas, tuviese oídos o no. En este mundo, la certeza y el orden eran poder, y la duda y el caos conseguían destruirlo todo.
Arcross lo sabía bien, desde que surgió la primera duda en este mundo, todo empezó a corromperse, y de esos personajes y paisajes corruptos, fue dónde Arcross encontró su filón, comenzó debilitando tanto a los personajes que le fue fácil extraer la vida prestada por Lexus, fortaleciéndose y expulsando personajes.
Así por primera vez, alguien en este mundo obtuvo más poder del que le estaba permitido, rompiendo el equilibrio y comenzando a debilitar a todo el universo creado por Lexus. Cuando esto pasó Lexus había permitido demasiadas razas y a consecuencia de eso su mente estaba dispersa, por eso cada vez que Arcross expulsaba a alguien y su fuerza vital no regresaba a Lexus. Éste fue sumiendose en un sopor hasta quedar inconsciente.
Pero ahora que el poder de Arcross no hacía efecto en aquella cadena, enseguida supo que Lexus estaba despertando y que se estaba preparando para atraparle.
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